Add parallel Print Page Options

El limpio de manos, y puro de corazón:

El que no ha elevado su alma á la vanidad,

Ni jurado con engaño.

Él recibirá bendición de Jehová,

Y justicia del Dios de salud.

Tal es la generación de los que le buscan,

De los que buscan tu rostro, oh Dios de Jacob. (Selah.)

Read full chapter